VIEJA HERIDA
Herida
que nunca cierra
por
mucho que el tiempo pase,
mantiénese
siempre abierta
como
perpetuo agravante.
Causada
años atrás
por el
arma lacerante,
de un
sistema despiadado
que me
forzó a exilarme.
Transito
en foráneo suelo
que me
acogió en su regazo,
al que
agradecido estoy
aunque
raro en él me hallo.
Sufro
nuevas experiencias
en este
camino largo,
que el
destino me ha ofrecido
hasta
no se sabe cuando.
Sigue
transcurriendo el tiempo
con su carga de mil años,
años
que se me acumulan
en
dilatado letargo.
No
cicatriza mi herida
aunque
trato, trato y trato,
la
añoranza me lo impide
en este
destierro amargo.
Mientras
más viejo me pongo
mis
esperanzas menguando,
más me
molesta esta herida
que me
sigue torturando.
Quizás
cuando un feliz día
vuelva
a la patria que amo,
ya ella
libre de impurezas,
libre
mi pueblo cubano,
cierre
al fin la vieja herida
que hoy
me está mortificando . . .
Cástulo
Gregorisch
5/31/17